San Martín mostró solidez en varios aspectos del juego y supo mantener su rol protagónico en este 2025 que lleva siete triunfos en los últimos nueve compromisos de esta fase regular de la Liga Nacional de Básquetbol (LNB). Y el triunfo por 87-68 ante Quimsa le permitió anoche seguir enfocado en sus aspiraciones de encontrarse con posibilidades de playoffs.

El perímetro local fue vital anoche y tuvo sus responsables: Lucas Gargallo aportó 18 puntos (4-7 en triples) y 4 asistencias, acompañado por Tomás Botta, dueño de 16 puntos (3 de 7 de tres), con 6 rebotes y 3 pases-gol.

En la visita, Tavario Miller sumó 12 puntos y Juan Ignacio Brussino aportó otros 11 (3 de 6 en triples).

    
Para los correntinos fue regresar a la victoria, ya que antes del receso había perdido en Formosa en tiempo suplementario, frente a La Unión por 86-81.

De esta manera, San Martín volvió a jugar como local y pudo confirmar su presente ante su público. Logró enderezar el camino local (había comenzado 2-2 en su estadio) y ahora lleva distancias con 9 triunfos y solo 2 derrotas. Lleva siete triunfos consecutivos pero que por el momento no le certifican posiciones de playoffs, ubicándose en el puesto 12° con una racha total ahora equilibrada de 11-11.

Por eso el juego de ayer era crucial. No fue fácil tomarse revancha de los santiagueños y descontar distancias sufridas en el último juego de 2024, cuando cayó como visitante por 107-84 (llegó a perder por 33 puntos, 93-60). En el juego de anoche llegó a sacar 21 puntos (68-47 en el cierre del tercer cuarto), pero el score final no achicó distancias para un emparejamiento (+19 para San Martín y +23 para Quimsa).

Ahora ambos se enfrentaron en 34 ocasiones en el historial de LNB, con 19 victorias para Quimsa y 15 para San Martín.

A principios de marzo, San Martín continuará con esta agenda local recibiendo a Peñarol del Mar del Plata el miércoles 5 y siendo anfitrión del clásico ante Regatas, el martes 11.